Panqueques salados rellenos de acelga

Panqueques salados rellenos de acelga

¿Buscas elevar tus recetas de panqueques a un nivel totalmente nuevo? Te invitamos a explorar nuestra deliciosa versión de panqueques salados rellenos de acelga, donde la acelga fresca es la protagonista principal.

En esta receta, aprenderás a combinar la esponjosidad clásica de los panqueques con la frescura vibrante de la acelga con otros ingredientes simples como el huevo creando así un bocado único en su clase que deleitará tus papilas gustativas y satisfará tus deseos de una experiencia culinaria fuera de lo común.

Prepárate para transformar tus desayunos o almuerzos en un festín saludable, lleno de sabor, creatividad y cargados de energía. Sigue nuestros simples pasos para crear una delicia única que sorprenderá a tu paladar y cautivará a tus comensales.

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Ingredientes para panqueques rellenos de acelga y huevo

La Masa:

300 g (2 tazas) de harina para todo uso o harina de trigo.
3 g (1/2 cucharadita) de sal.
190 ml (0,8 taza) de agua.

El Relleno de acelga y huevo:

Para los huevos

  • 4 huevos
  • 1/4 de cucharadita de sal
  • 1 1/2 cucharadas de aceite vegetal

Para las acelgas

  • 250 g de acelga (sustituye por col, u otras verduras de tu elección)
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1/2 pimiento picado
  • 1 ajo picado finamente
  • 2 cucharadas de cilantro picado
  • Aceite

Preparación de la receta de panqueques salados rellenos de acelga

1 Comienza mezclando en un bol grande la harina y la sal con suavidad, utilizando una espátula. Una vez que estén bien incorporadas, lleva la mezcla a una superficie de trabajo y amasa con tus manos.

2 Detente cuando la masa ya no se adhiera a tus manos (evita amasar en exceso). Luego, cúbrela y déjala reposar durante unos 5 minutos.

3 Después de esos 5 minutos de descanso, retoma el amasado de la masa unas cuantas veces más hasta obtener una textura suave y agradable al tacto.

4 Ahora, coloca la masa sobre el banco y aplánala poco a poco. Divide la masa en 8 porciones del mismo tamaño, y dale una forma redondeada a cada trozo.

5 Pincela la superficie de cada porción con aceite de cocina. Cubra la masa con papel film y reposar durante unos 20 minutos.

6 En un tazón, bate los huevos suavemente. Añade la sal, la pizca de sabor que hará que todo cobre vida, y mezcla con entusiasmo.

7 Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-bajo. Añade el aceite vegetal. Cuando el aceite esté en su punto, vierte la mezcla de huevo.

8 Utiliza una cuchara para revolver los huevos hasta que se formen pequeños granos de huevo, trocea los trozos grandes si es necesario. Luego, déjalos reposar y enfriar.

9 Mientras tanto, pica la acelga (o la verdura de tu elección) y colócala en un recipiente grande, agrega 1 cucharada de aceite vegetal y revuelve bien.

10 Calienta 1 cucharada de aceite en una sartén antiadherente y saltea las acelgas por un par de minutos, agrega sal al gusto e incorpora el pimiento, el cilantro y el ajo. Revuelva y cocina por unos minutos más.

11 Llega el momento de reunir a los protagonistas: los huevos revueltos y las verduras picadas. Mézclalos suavemente en un bol grande. ¡Tu relleno está listo para robarse el show!

12 Una vez que la masa ha tenido su merecido descanso, toma un trozo y estíralo con la manos hasta que se vuelva fino.

13 Es hora de la verdadera magia. Agrega una porción del relleno en el centro, envuelve y aprieta con suavidad hasta que el panqueque quede bien sellado.

14 Voltea el panqueque y aplástalo suavemente, como un artista perfeccionando su obra maestra. Procede de la misma manera hasta utilizar toda la masa.

15 Añade un poco más de aceite de cocina a la sartén, deja que se caliente y coloca los panqueques salados rellenos de acelga con cuidado. Pincela con el aceite la parte superior mientras se cocina.

16 Cubre la sartén y cocina a fuego lento durante aproximadamente 1 minuto. Luego, voltéalos con confianza y fríe el otro lado durante un minuto. Voltea una vez más y deja dorar, voltea otra vez para que ambos lados se vuelvan dorados y dignos de admiración.

17 Retira del fuego cada panqueque de acelga y deposítalos en un plato forrado de papel absorbente. Sírvalos tibios y acompaña con una bebida caliente.

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